La educación es uno de los factores que más influye en el avance y progreso de personas y sociedades. Además de proveer conocimientos, la educación enriquece la cultura, el espíritu, los valores y todo aquello que nos caracteriza como seres humanos; por ello asumimos la postura de la Ley General de Educación 28044, cuando expresa que:

La educación es un proceso de aprendizaje y enseñanza que se desarrolla a lo largo de toda la vida y que contribuye a la formación integral de las personas, al pleno desarrollo de sus potencialidades, a la creación de cultura, y al desarrollo de la familia y de la comunidad nacional, latinoamericana y mundial. Se desarrolla en instituciones educativas y en diferentes ámbitos de la sociedad.

En este sentido, el Programa de estudios de Educación Primaria ha sido diseñado en el marco de la convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Niños; Declaración de la Jomtien (1990) en relación con la Declaración Mundial sobre educación para todos, de Dakar; donde reconocen que cada persona niño, joven o adulto debería estar en condiciones de aprovechar las oportunidades educativas ofrecidas para satisfacer sus necesidades básicas de aprendizaje. Por otro lado, el Proyecto Educativo Nacional al 2036.

La Educación en general y en especial la educación Primaria permiten a los individuos adquirir habilidades y competencias fundamentales para convertirse en ciudadanos empoderados capaces de participar activamente en su cultura, sociedad y economía. Además, los años de escolarización constituyen un espacio clave para generar conectividades e interacciones positivas entre grupos sociales y culturales diversos y durante los mismos se construyen y transmiten valores y actitudes compartidas indispensables para la vida en sociedad y el desarrollo del capital y la cohesión social en la comunidad.